Duran­te el ter­cer tri­mes­tre de 2024, la situa­ción de segu­ri­dad en Méxi­co sigue enfren­tan­do impor­tan­tes desa­fíos, prin­ci­pal­men­te debi­do a la influen­cia per­sis­ten­te del cri­men orga­ni­za­do. A con­ti­nua­ción, se resu­men los desa­rro­llos más rele­van­tes entre julio y sep­tiem­bre de 2024:

1. Aumen­to de la Vio­len­cia en Gue­rre­ro Gue­rre­ro se ha con­so­li­da­do como uno de los esta­dos más vio­len­tos en los últi­mos meses, con un aumen­to del 47% en los homi­ci­dios en com­pa­ra­ción con el tri­mes­tre ante­rior. Este incre­men­to se debe a las luchas terri­to­ria­les entre cár­te­les riva­les por el con­trol de las rutas de pro­duc­ción y dis­tri­bu­ción de dro­gas. El gobierno fede­ral ha envia­do refuer­zos mili­ta­res adi­cio­na­les a la región en un inten­to por esta­bi­li­zar la situa­ción, pero la vio­len­cia sigue afec­tan­do tan­to a zonas urba­nas como rura­les (El Uni­ver­sal).
2. Cre­ci­mien­to de la Per­cep­ción de Inse­gu­ri­dad La per­cep­ción nacio­nal de inse­gu­ri­dad ha alcan­za­do el 64%, lo que refle­ja una cre­cien­te fal­ta de con­fian­za en la segu­ri­dad públi­ca. Ciu­da­des como Aca­pul­co, Ira­pua­to y Eca­te­pec han repor­ta­do nive­les par­ti­cu­lar­men­te altos de temor entre sus habi­tan­tes, con la vio­len­cia de pan­di­llas y los robos a mano arma­da como los prin­ci­pa­les fac­to­res. A pesar de los esfuer­zos para redu­cir el cri­men, la bre­cha entre las esta­dís­ti­cas delic­ti­vas y el sen­ti­mien­to públi­co con­ti­núa amplián­do­se (Refor­ma).
3. Aumen­to de Ata­ques a Perio­dis­tas y Acti­vis­tas Entre julio y sep­tiem­bre se ha regis­tra­do un preo­cu­pan­te incre­men­to en los ata­ques con­tra perio­dis­tas y acti­vis­tas de dere­chos huma­nos, espe­cial­men­te en los esta­dos de Michoa­cán y Tamau­li­pas. Varios casos de inti­mi­da­ción, ame­na­zas y vio­len­cia han lla­ma­do la aten­ción inter­na­cio­nal sobre la segu­ri­dad de quie­nes infor­man sobre el cri­men orga­ni­za­do. Las auto­ri­da­des han anun­cia­do nue­vas medi­das de pro­tec­ción, pero la res­pues­ta ha sido cri­ti­ca­da como insu­fi­cien­te por orga­ni­za­cio­nes de dere­chos civi­les (Ani­mal Polí­ti­co).
4. Impac­to en el Turis­mo y Eco­no­mías Loca­les La vio­len­cia con­ti­nua ha comen­za­do a afec­tar sec­to­res eco­nó­mi­cos cla­ve, inclu­yen­do el turis­mo. Esta­dos cos­te­ros como Quin­ta­na Roo han repor­ta­do una dis­mi­nu­ción nota­ble en la lle­ga­da de turis­tas inter­na­cio­na­les, par­ti­cu­lar­men­te en áreas cer­ca­nas a regio­nes afec­ta­das por la vio­len­cia del nar­co­trá­fi­co. Los nego­cios loca­les han expre­sa­do su preo­cu­pa­ción por el impac­to a lar­go pla­zo en los esfuer­zos de recu­pe­ra­ción eco­nó­mi­ca pos­pan­de­mia, esti­man­do pér­di­das de más de $1 mil millo­nes en ingre­sos por turis­mo solo en este tri­mes­tre (Info­bae).
5. Estra­te­gias del Gobierno y Deba­te Públi­co El gobierno mexi­cano ha segui­do des­ple­gan­do uni­da­des mili­ta­res y de la Guar­dia Nacio­nal en las regio­nes más vio­len­tas del país, pero la efec­ti­vi­dad de estas medi­das sigue sien­do cues­tio­na­da. La opi­nión públi­ca está divi­di­da: algu­nos abo­gan por un enfo­que más agre­si­vo, mien­tras que otros exi­gen una mayor inver­sión en pro­gra­mas socia­les para abor­dar las cau­sas pro­fun­das del cri­men. Los deba­tes sobre el futu­ro de la estra­te­gia de segu­ri­dad en Méxi­co se han con­ver­ti­do en un tema cen­tral a medi­da que el país se pre­pa­ra para las elec­cio­nes gene­ra­les de 2024 (Mile­nio).

Estos desa­rro­llos resal­tan los con­ti­nuos desa­fíos de segu­ri­dad que enfren­ta Méxi­co, don­de el cri­men orga­ni­za­do sigue ejer­cien­do una influen­cia sig­ni­fi­ca­ti­va tan­to en la segu­ri­dad públi­ca como en el pano­ra­ma eco­nó­mi­co gene­ral.